Cómo hidratar setas deshidratadas
Es probable que, en alguna ocasión, hayáis comprado en vuestro comercio de confianza un paquete de setas deshidratadas. Que no os engañe su apariencia, pues detrás de ese aspecto seco y rugoso se esconde un producto envasado con todas sus cualidades intactas, sin conservantes ni colorantes. Está claro que, a la hora de cocinar, lo mejor es utilizar productos frescos y de temporada, pero en las setas deshidratadas encontramos algunas excepciones. Sin embargo, antes de consumirlas tal y como se venden, hay que hidratarlas. Es decir, hay que conseguir que vuelvan a recuperar la humedad que perdieron en el proceso anterior.
En este vídeo del Canal Cándido TV, utilizaremos trompetillas de la muerte, pero para esta receta se puede utilizar cualquier variedad de seta comestible. En primer lugar, colocamos una cazuela al fuego con agua. Cuando haya levantado el hervor, se retira del calor y se incorporan las setas deshidratadas. Aquí las dejaremos por espacio de 50 minutos. Dependiendo del uso que luego queramos dar al caldo, también podemos añadir sal. Una vez rehidratadas, las setas recuperarán buena parte de su tamaño. A partir de ahora, ya se puede añadir a la elaboración que tengamos en nuestra cabeza, bien un guiso, un revuelto o una sencilla tortilla de patatas. ¡Y no os olvidéis del agua! Las setas lo habrán dejado ‘teñido’, pero eso no significa que haya que descartarlo. Es ideal para añadir en arroces, rosottos o enriquecer caldos.
http://www.canalcandido.tv/receta/rehidratar-setas-deshidratadas-373-126