El cochinillo asado no es tan solo un manjar…
No os vamos a contar nada que no sepáis, pero si hay un plato que simboliza a la perfección la gastronomía segoviana ese es el cochinillo asado. Y si hay un establecimiento que verdaderamente lo ha internacionalizado, todos estaríamos de acuerdo en que ha sido el Mesón de Cándido. No solo por el producto, sino también por la forma de servirlo, cortándolo con el borde de un plato para después hacerlo añicos contra el suelo (el plato, no el cochinillo, por favor).
Nadie duda de que el cochinillo asado es un auténtico manjar. Una carne jugosa recubierta por una piel tostada que hará las delicias de pequeños y mayores. Pero este plato va más allá. El sabor es solo una de las múltiples cualidades que os queremos contar en esta publicación, para que veáis que el tostón asado es una gran elección en nuestras comidas. Se encuentra dentro de los alimentos propios de la dieta mediterránea y su consumo semanal puede ser recomendable. Además, aunque el cerdo adulto sea carne roja, la del lechón se considera carne blanca, por lo que es mucho más saludable. Un alimento sin procesar y rico en nutrientes que ha sido elaborado de manera natural, alimentándose tan solo de la leche de su madre, y que está compuesto, en buena parte, por agua. También debemos resaltar que el cochinillo es rico en grasas monoinsaturadas, es decir, en grasas buenas para la salud.
¿Os hemos convencido? El cochinillo está delicioso, eso ya lo sabíamos todos. Pero, además, ahora sabemos que es un producto realmente aconsejable en nuestra dieta. ¡Lo tiene todo! Así que, si queréis probarlo, solo tenéis que venir al Mesón de Cándido. Os dejamos por aquí la receta de nuestro lechón asado para que veáis que no hay trampa ni cartón en su elaboración.