Los dos platos que no faltan en el Mesón de Cándido en septiembre
Si por algo destaca el Mesón de Cándido es por ser un auténtico estandarte de la comida segoviana. En sus comedores nunca faltan los entrantes, ya sean fríos o calientes, además de las carnes y los pescados. Todo ello acompañado de un buen Ribera del Duero, por ejemplo, y de algún postre típico como puede ser el ponche segoviano. Con tantas opciones no resulta fácil elegir, así que hoy os vamos a sugerir dos platos que no faltarán en nuestra carta durante el mes de septiembre.
Judiones de La Granja con oreja de cerdo. Este es, sin duda, uno de los platos estrella del Mesón de Cándido. En septiembre llegará el frío a la ciudad de Segovia y los judiones calientes servidos en cazuela de barro os ayudarán a recibir el otoño de una forma más amena. Una cocción lenta y un producto de excepcional calidad garantizan un bocado sabroso y tradicional a partes iguales.
Sopa castellana del siglo XV. Seguimos pensando en mantener el calor del verano, aunque solo sea en el estómago. Hay pocas formas mejores de recibir el mes de septiembre que probando la famosa sopa castellana del Mesón de Cándido. Una receta humilde, económica y tremendamente nutritiva que, sin duda, tiene un sabor diferente si la comes con el acueducto como testigo.
Estos son tan solo dos de los platos que podréis disfrutar en nuestra casa si os acercáis a Segovia en el mes de septiembre. Y no, no se nos ha olvidado el cochinillo, pero estamos seguros de que no hace falta que os hablemos de él para que decidáis incluirlo en vuestro menú. Esperamos que estos datos os hayan servido de ayuda. ¡Nos vemos en septiembre en el Mesón de Cándido!