¿Por qué siempre suena La Entradilla cuando aparece el cochinillo en el comedor?

A la pregunta, la respuesta del gran folclorista segoviano Agapito Marazuela: “La Entradilla simboliza el valor de la música castellana (…), tanto por su melodía, como por su ritmo y por su danza (…). Aunque no hubiese más que ella, merecería la pena ser mentado el folclore castellano”. Cándido, el Mesonero, no solo recuperó para su casa la sintonía de estos compases únicos, sino que los llevó a todos los lugares del mundo donde viajó y mostró el arte del trinchado del cochinillo. La melodía es una pieza exquisita y no todo el mundo sabe que se acompaña de una danza, escenificada antiguamente en procesiones, bodas o recibimientos.

La Entradilla hoy sigue formando parte del Mesón de Cándido. Su sintonía es un símbolo más de nuestra casa y contribuye a crear entrañables lazos que nos recuerdan nuestra procedencia, nuestro origen, el alma del más profundo sentimiento segoviano. La dulzaina, que es el sonoro instrumento de viento con el que se toca, hace posible ese encuentro con lo más sublime de la música tradicional. Y pocos lugares hay en este mundo donde una pieza tradicional de esta importancia se recupere, se haga sonar, se recuerde y se defienda con más ahínco que el Mesón de Cándido.