Hoy, 18 de diciembre, es el Día Internacional del Cochinillo Asado, una fecha que nos invita a celebrar un plato que forma parte de la identidad segoviana. Más allá de ser un manjar, el cochinillo asado representa nuestras raíces, nuestra tradición y el cuidado por las cosas bien hechas.
El cochinillo es mucho más que un plato en un menú: es historia. En cada horno de leña, se repite un ritual que ha pasado de generación en generación, donde lo simple se convierte en excepcional. Ingredientes naturales, fuego y tiempo son los protagonistas. El resultado es un sabor único que hace del cochinillo una experiencia inolvidable para quienes lo prueban.
En esta historia, Cándido López tuvo un papel crucial. Fue él quien trabajó incansablemente para que el cochinillo asado no solo fuera el orgullo de Segovia, sino también un referente gastronómico más allá de nuestras fronteras. Su esfuerzo ayudó a que esta tradición local se convirtiera en universal.
Hoy, en el Mesón de Cándido, mantenemos viva esa herencia. Cada cochinillo que preparamos es un homenaje a nuestra tierra, a nuestras tradiciones y a las personas que, como Cándido, han dedicado su vida a preservarlas.
Si aún no has disfrutado de esta joya gastronómica, te invitamos a hacerlo. Y si el cochinillo ya forma parte de tus recuerdos, hoy es un buen día para volver a saborearlo.
¡Feliz Día Internacional del Cochinillo Asado!
