Ahora que los primeros vientos de otoño nos dan la bienvenida, en Mesón de Cándido queremos darte una receta tradicional que seguro que hace que todo el mundo disfrute: leche frita. Como siempre, vamos primero con los ingredientes.
-Leche
-Harina de maíz
-Azúcar
-Vaina de vainilla
-Cáscara de limón (solo la parte amarilla)
-Cáscara de naranja
-Harina
-Huevo
-Canela
Lo primero es poner un cazo amplio al fuego. Añadimos la leche, menos una pequeña proporción, que reservaremos para luego. Incorporamos el azúcar, la vaina de vainilla abierta a la mitad, la cáscara de limón y la cáscara de naranja. Ponemos al fuego hasta que hierva.
Mientras se calienta la mezcla, añadimos la leche que habíamos reservado a la maicena o harina de maíz y removemos hasta que esté totalmente integrada. Este paso es importante para que no queden grumos.
Cuando hierva la leche, bajamos el fuego al mínimo y dejamos infusionar durante un minuto. Retiramos la cáscara de limón, la cáscara de naranja y la vainilla. Mantenemos el hervor y, sin dejar de remover, añadimos la harina de maíz disuelta en la leche fría.
Seguimos removiendo, debemos varillear enérgicamente para evitar que salgan grumos, hasta que la mezcla cuaje. Entonces dejaremos hervir un minuto más con mucho cuidado para que no se agarre. Hay que tener claro que la harina de maíz debe hervir al menos un minuto para que no se relaje al enfriarse.
Es el momento de trasladar la mezcla a un recipiente, donde lo cubriremos cuidadosamente y lo dejaremos enfriar. Una vez que esté cuajado, lo partimos en trozos y lo pasamos por harina y por huevo batido para luego freírlo. Tenemos que tener cuidado para que no se nos dore en exceso. Ya solo nos queda pasar los trozos de leche frita por una mezcla de azúcar y canela. ¡Y ya está!
Si quieres ver toda la receta paso a paso, puedes hacerlo en nuestro canal de YouTube: https://youtu.be/gOnFfea_ASo