La firma de Cervantes, en el Mesón de Cándido
La incontable cifra de firmas que se han estampado en el Libro de Oro del Mesón de Cándido solo es comparable con el número de comensales distinguidos que han pasado por nuestra casa. Cándido López lo colocó delante del primer comensal en 1932 y, desde entonces, el paso del tiempo se ha encargado de apilar un tomo sobre otro. En una ocasión, hace ya tres décadas, Cándido rescataba el tomo segundo (el primero de toda la serie que se conserva, por cierto) para rememorar la pequeña historia que encierran sus páginas. Sus tapas, de cuero repujado, grabadas a cuchillo y punzón, llevan la imagen de un rincón de Segovia ya desaparecido: el Acueducto desde la calle Gascos. En su interior hay un pergamino, con los escudos de España y Segovia, y las firmas del duque de Alba, la duquesa de Montoro y el duque de Ardales. La fecha marca el nacimiento del tomo: 11 de junio de 1947, por cierto, el mismo día que visitó Segovia Eva Duarte de Perón.
Pero hay otro pergamino del mismo tomo que no pasa desapercibido, pues recoge las firmas de grandes personajes de la historia de España. ¿Cómo puede ser eso?, ¿Qué secreto oculta el famoso pergamino? Resulta que el ingenioso Mesonero tuvo entonces la ocurrencia de reproducir en él las firmas de personajes como Isabel la Católica, Hernán Cortés, Juana I de Castilla, Carlos V, Miguel de Cervantes, Calderón de la Barca, Francisco de Goya, Felipe IV, Zorrilla y unos cuántos más. El tomo, como es de suponer, se guarda como un tesoro, no por la autenticidad de sus firmas, sino porque fue el blanco del ingenio de su dueño… y porque es el primero que hoy conservamos de toda la colección.